Hace menos de un año que la Iglesia Hispana de Pasco celebró su libertad de ya no hacer pagos mensuales de hipoteca y dedicó su edificio. Ahora su iglesia hija, la Iglesia Hispana de Kennewick, ha comprado su propio edificio y se ha trasladado.
A solo unos meses de la dedicación de la Iglesia Hispana de Pasco, la Iglesia Hispana de Kennewick, que se reunía los sábados por la tarde en la Iglesia Anglo de Kennewick, comenzó a orar y a buscar un edificio para comprar y poder tener finalmente su propia iglesia. Encontraron una iglesia en venta en la parte este de Kennewick, un área poblada por muchos hispanos. Un santuario grande, un espacioso salón multiusos, y una ubicación ideal, han hecho que esta propiedad sea perfecta para los miembros hispanos de la iglesia de Kennewick.
Este edificio de 11.737 pies cuadrados, situado en 1,23 acres en una calle principal, tenía un precio muy bueno de $325.000. Pero, ¿cómo podría una pequeña iglesia hispana con solo $8.500 llegar a hacer una oferta seria? La respuesta se encuentra en Romanos 8:31,32. “¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?”
Evidentemente, Dios estaba bendiciendo a la Iglesia Hispana de Kennewick en esta misión. Comenzaron a llegar donaciones y promesas de ayudas de todas partes. Los miembros de la Iglesia Hispana de Kennewick y Pasco reunieron un total de $85.000 en promesas. La Conferencia de Upper Columbia también apoyó este proyecto. Se recibieron fondos de acciones de la UCC y una donación adicional también de la UCC. Luego de un par de meses, la congregación ya tenía suficiente dinero para hacer el pago inicial y se hizo una oferta de $299.900, la cual fue aceptada.
El primer servicio en la nueva iglesia se llevó a cabo el 6 de agosto. Fue un momento lleno de gozo con mucha música y adoración, una representación por el grupo de jóvenes de la iglesia y un mensaje inspirador por Ramón Canals, director del ministerio hispano en la Unión del Pacífico Norte, quien predicó acerca del reavivamiento en la iglesia.